Particularmente me encanta este espacio. Quizá no quede refugiado por completo y alejado de las miradas de los adultos. No obstante, a la vista está que es un bonito ambiente para que los pequeños puedan jugar tranquilamente. Techos bajos, que pueden falsearse con materiales como el pladur, una ventana para mirar al exterior y una bonita y cálida alfombra. Una casita abierta para que tus hijos jueguen con todos sus muñecos.
Qué _Katharinamaria tiene gusto, era algo obvio. Ya lo descubrimos el día en que visitamos su tienda online edelweissdesigns.de, un escaparte increíble con marcas muy interesantes y productos delicados, de esos que hacen personales las habitaciones. No obstante, hoy nos centramos en su cuenta de Instagram, que es una excelente fuente de inspiración a la hora de decorar nuestros propios dormitorios infantiles. Mejor dicho, los de nuestros peques.
¿Por qué morir siempre en los muebles clásicos? La cuna es un elemento que tiene un uso limitado en el dormitorio infantil ¿No sería buena idea aplicar color en ella? Escoger cunas con colores pastel puede dar mucha vida a la habitación. Además, si como en el ejemplo, tienes unas paredes llamativas, puede ser el contrapunto perfecto. Serenidad frente al caos cromático.
Finalmente nos centramos en la lana. De todos los materiales naturales que hemos nombrado, es, de lejos, la más confortable. Las mantas de lana, por ejemplo, pueden arropar muy bien a tu hijo. Además, son muy pero que muy estéticas. Puedes incluir la lana en cualquier textil infantil, ya sean colchas, alfombras o cojines. Si usas lana con diferentes colores lograrás, además, poner el punto de color a este ambiente infantil con materiales naturales.
Entre los materiales naturales más recomendables para ambientes infantiles, la madera debe figurar en un primer puesto. La madera es cálida, por lo que hará que las habitaciones de tus hijos sean muchísimo más acogedoras. Es capaz de combinar con cualquier color, sin importar si eres más de dormitorios blancos o con papeles pintados de mil colores. Ahora bien, si quieres una madera más natural, intenta buscar muebles que no estén excesivamente tratados. Úsala para las camas, para las mesas y escritorios, estanterías e incluso para los juguetes de tus hijos.
El cabecero y el perchero amarillo, que también sirve como una especie de mesita de noche, son de Peek and Pack. El padre de Susana es el encargado de hacerlo para su propia tienda. La verdad es que, a simple vista, uno puede ver que se alejan mucho de lo que estamos acostumbrados a ver. Un toque de modernidad en esta habitación infantil.
Si hay algo que nos permite cambiar la decoración de una estancia sin un gran desembolso de dinero, eso es, sin duda, el textil. El textil infantil es uno de mis recursos favoritos para dar personalidad a una habitación. Opciones hay tantas que nos podemos volver locos. Desde los más arriesgados hasta los más sutiles. Desde las fundas nórdicas a todo color, hasta las colchas de cama monocromáticas y elegantes ¿Qué tipo de textil quieres incluir en el dormitorio de tu hijo?
No hace falta que te centres en los estampados. También es posible jugar con textiles monocromáticos, y la verdad es que no quedan nada mal. Sobre todo, si combinas varios colores, creando grandes contrastes. Es una forma de apostar siempre por tonalidades que son tendencia, como actualmente el ocre, mostaza o amarillos en general. Súmale gris y azul al conjunto y obtendrás maravillas como la de la imagen.
Sí, el esparto puede convertirse en bonitas alfombras. Es cierto que no son tan mullidas como las de lana u otros materiales. No obstante, no podemos negar que quedan preciosas en un dormitorio infantil con toques rústicos. Además, si lo prefieres, podrías incluir este material en otros elementos como lámparas, sillas o incluso objetos decorativos para la pared.
No se aprecia mucho de este ambiente. No obstante, las partes que sí pueden verse son de lo más atractivas. Un rincón especial de juego hecho con una tienda de campaña. Un tipi renovado que permite que tu hijo pueda meterse dentro e imaginar cientos de historias. De telón de fondo una pared de pizarra ¿Hay algo mejor para poder dibujar los escenarios de un mundo de juegos?
La decoración natural es siempre un acierto. Sobre todo, si hablamos de niños. Sí, los pequeños pasan por fases en las que todo, absolutamente todo, se lo llevan a la boca. Teniendo en cuenta esto, quizá sea mejor apostar por materiales naturales, lo menos tratados posible, y alejarnos de muebles y superficies plásticas.
Hoy os hablamos de la decoración en ambientes infantiles con materiales naturales, de esos que además de ser acogedores e inocuos para nuestros hijos, ayudan a cuidar un poquito más nuestro planeta.
Los elementos de juego también forman parte de la decoración infantil. Desde una casa de muñecas, una cocina de juguete o un cajón para guardar los ositos de peluche. Estos elementos no son excesivamente grandes, por lo que podrían convertirse en un buen objetivo para pintarlos con colores pastel.
Las alfombras son cálidas. Si tenemos en cuenta que los niños pasan muchísimo tiempo jugando en el suelo, no es de extrañar que sean también clave en esto de los rincones de juego. Este ambiente también es muy interesante. No sólo por el uso del color, que es evidente, también por el empleo de varias alfombras en el pavimento. Alfombras que lograrán que el juego sea mucho más agradable en los meses fríos.