No te olvides de las sillas. Tienen que ser cómodas y deben permitir que el niño tenga una postura saludable. No es imprescindible, pero la luz de las ventanas es siempre bienvenida en esto de los espacios de trabajo. Ubicar el escritorio cerca de una ventana nos proporcionará luz natural por el día, algo que es esencial para poder trabajar bien.
Las estanterías también pueden ser útiles. También mucho más económicas, todo sea dicho. Una estantería que divida justo el área de juegos de la cama hará que tu hijo tenga dos ambientes perfectamente delimitados. Como puedes ver en la imagen, una buena apuesta serían las estanterías con grandes huecos centrales. Esas que permiten pasar la luz y no se convierten en un gran mueble que asfixie el dormitorio infantil.
Recordad lo importante que es que los pequeños aprendan disciplina en el ámbito del orden desde muy pequeños. Esto nos evitará problemas cuando sean más mayores e indomables.
Es momento de hablar del almacenaje. Es evidente que vamos a necesitar espacio para poder colocar material para trabajar. Las estanterías son un buen recurso. También podrías usar casilleros, en los que tu hijo pueda dejar sus libretas, papeles y demás.
Para terminar, un ejemplo similar al anterior, pero con matices. En este caso es una de esas camas altas que dejan la parte inferior para almacenaje (un buen aporte en las habitaciones más pequeñas). Lo que me gusta, es el sistema de cortina que incorpora.
El mimbre es un material natural de lo más encantador. Un material que puede, además, darnos muchísimo juego en la decoración de interiores. Sí, también en las habitaciones infantiles. Incluir piezas de mimbre en la habitación infantil, hará que ganen en personalidad.
Siempre decimos que la iluminación es esencial en una habitación infantil. En este dormitorio se cumple a la perfección. La luz es clara y hace que el espacio sea mucho más agradable. Un lugar estupendo para jugar y soñar. Ahora bien ¿cómo han logrado esta iluminación de 10? Evidentemente la fuente de luz natural está. No obstante, hay colores que la potencian.
Hoy os traigo unos dormitorios infantiles que me han robado completamente el corazón. Sí, soy bastante fanática de los interiores escandinavos en general. No obstante, creo que los que Katharinamaria muestra en su cuenta de Instagram tienen un sabor especial. Menos común y con más encanto. Pasen y vean. Prometo que más de uno va a enamorarse.
Selfeet es una nueva funda de cojín de 50×50 con un diseño muy pero que muy divertido. Con cierto aire abstracto y entretenido, en la funda aparecen tres pies con cara. Sí, tres pies con cara de pillos que no necesitan calcetines para disfrutar del buen tiempo.
El suelo es neutro, un suelo continuo que ayuda a aumentar los metros de forma visual. El color gris del mismo, más las otras tonalidades de la pared, podrían crear una estancia un poco fría. Por este motivo, optan por la madera en el mobiliario. Además, una madera muy pura, de esas que tienen un aspecto de lo más natural.
Los textiles coloridos son también bien recibidos. Sobre todo, en estancias con paredes blancas y con colores neutros. Pero, además, hay un mundo de posibilidades. No sólo puedes aportar personalidad y color con fundas nórdicas o cojines. Hazlo también con alfombras, que dan mucha calidez a las estancias. Un lugar maravilloso en el que tus hijos podrán jugar.
Muy sencillo, añadiendo unas bonitas cortinas. Si el peque quiere encerrarse en su mundo para jugar, descansar o leer, tan fácil como correr las cortinas y listo. El resto de la decoración también hay que destacarla. Colores pastel, mucho blanco y paleta neutra en muebles y suelo y esa lámina en la pared que me parece una auténtica maravilla.
La zona de estudio de tus hijos tiene que ser una zona iluminada, para que puedan trabajar mejor. Esto no implica que tengas que usar siempre colores blancos y materiales desnudos como la madera. Este ejemplo es perfecto para ilustrarlo. Un escritorio o zona de estudio en la que el rosa pastel no evita la iluminación natural. El niño se sentirá mucho más cómodo en un lugar alegre como este, pero sin desviar demasiado su atención sobre los libros.
Con un nombre que nos recuerda a nuestros días de infancia, el cojín decorativo Veo, Veo es de lo más gracioso, colorido y moderno. El nombre no es casual, claro que no. De alguna forma, desde Bandide intentan hacer un homenaje a los juegos de toda la vida. Esos juegos que todos hemos disfrutado y esperamos que nuestros hijos también sepan apreciar.
Que estamos ya acostumbrados a ver el típico tipi indio es una realidad. No, no va a pasar de moda por el momento. No, tampoco nos importa. Es un elemento de lo más interesante y funcional. Un lugar en el que le pequeño puede divertirse y, además, decora.