¿Lo mejor de todo? El diseño a doble cara. Por un lado, unas grandes gafas te observarán. Por el otro, un montón de gafas más pequeñitas parecen crear un collage de lo más dinámico. Miradas pícaras para niños pícaros. Además, como en el caso anterior, los colores son de lo más acertados. Fondo blanco nuevamente, para poder introducir el cojín en cualquier ambiente, y amarillo, un toque vibrante para todas las habitaciones infantiles.
Si quieres destacar este material, puedes pintar las paredes en blanco, como en el ejemplo. Verás que, añadiendo madera de la misma tonalidad, no resulta una estancia en absoluto fría. Todo lo contrario.
Para terminar, hablemos de la paleta cromática. No hay colores prohibidos. Pero pongamos un poco de sentido común. Si lo que buscamos es concentración, no es buena idea saturar la zona de escritorio con colores demasiado estridentes. Es mucho mejor apostar por el blanco. Quizá algún color frío o neutro. No sólo potenciarás la iluminación natural de la zona de escritorio. También harás que tu hijo esté más relajado en el momento de hacer sus tareas.
Aunque las habitaciones coloridas nos gustan. Las habitaciones infantiles que encuentran el equilibrio con pocas tonalidades, son una verdadera maravilla. Hoy os traigo un ejemplo perfecto para una habitación infantil. Un dormitorio elegante, a base de menta y blanco, que se presenta amplio y luminoso. La inspiración perfecta para el dormitorio de tu hijo.
Aunque toda la casa de Susana Sandonis es una verdadera maravilla, la habitación de sus hijos, Martina y Nico, es para enmarcar. Sí, uno de esos lugares mágicos en el que ni el desorden parecería afear nada.
Esta funda está fabricada en algodón 100%. No incluye relleno, por lo que es una funda que tendrás que adaptar a tus propios cojines. Fíjate bien en las dimensiones de los tuyos para ver si encajan.
Si tu hijo es un fanático del mundo animal, seguramente se sentirá la mar de cómodo en un dormitorio con esta temática. En concreto los textiles pueden darnos mucho juego. Los hay con diseños más sutiles, con pequeños animales decorando cojines y colchas.
Su aspecto encaja a la perfección con la decoración natural ¿Lo mejor de todo? Tiene gran resistencia, algo que con niños siempre es bueno. Dura muchísimo tiempo, sí, pero también es un tejido que se seca con facilidad y que se adapta bien a cualquier clima.
En cuanto a los textiles se refiere, hay muchos tejidos naturales que pueden venirnos bien. El lino, por ejemplo. El lino es la fibra de la planta de lino, un tejido milenario que antiguamente se usaba en toallas, manteles y sábanas. Ahora, este material se ha incluido en todo tipo de complementos textiles para el hogar.
Quizá no sea la más estética, pues hay que reconocer que las demás ganan en este aspecto. No obstante, un biombo puede ser una buena idea para separar un dormitorio infantil. Una idea muy económica y que, además, te permitirá liberar esta separación en un momento dado ¿Imagina que un amigo de tu hijo se queda a dormir? Quizá prefieres que puedan disponer de todo el espacio del dormitorio sin limitaciones. Aquí el biombo gana terreno. Una solución de quita y pon.
No es una novedad. Lo más importante en un escritorio es contar con una buena superficie de trabajo y un buen asiento. La mesa deberá ser amplia, para que el pequeño no tenga problema a la hora de colocar sus libros, libretas y demás. En un dormitorio podemos encontrarnos con el problema del espacio. Por ello, intenta aprovechar los rincones. Hay incluso posibilidades de crear un escritorio que aproveche las esquinas. Tableros y escuadras pueden ayudar muchísimo en esta tarea.
Su aspecto encaja a la perfección con la decoración natural ¿Lo mejor de todo? Tiene gran resistencia, algo que con niños siempre es bueno. Dura muchísimo tiempo, sí, pero también es un tejido que se seca con facilidad y que se adapta bien a cualquier clima.
Que estamos ya acostumbrados a ver el típico tipi indio es una realidad. No, no va a pasar de moda por el momento. No, tampoco nos importa. Es un elemento de lo más interesante y funcional. Un lugar en el que le pequeño puede divertirse y, además, decora.
Es posible que no cuentes con un dormitorio muy grande ni con una habitación de juegos independiente. No obstante, hay soluciones para todo. Me encanta esta opción. Una gran estantería, con cierto sabor vintage, en la que pueden almacenarse todo tipo de juguetes.
Si algo llama poderosamente la atención de este dormitorio infantil, es el papel pintado. Un papel que se mueve entre lo exótico y lo infantil. Los toques verdes dan un aire muy tropical. Pero al fijarse, uno puede ver leones y tigres, con un trazo infantil que enamora al instante. Sea como sea, el conjunto es de lo más llamativo.