Además, si el espacio es muy pequeño, siempre puedes recurrir a los tabiques pequeños. Pequeños muros que llegan a una altura media y dividen sin restar ni un ápice de luz ni disminuir el espacio a los ojos.
Nos encanta pasearnos por la red descubriendo nuevas opciones de decoración para habitaciones infantiles. De vez en cuando, y por arte de magia, aparecen frente a nosotros maravillas como la que hoy os queremos acercar. Un concepto muy pero que muy bien trabajado de lo que podríamos catalogar como “Diseño elegante y divertido en habitaciones infantiles”. Los encargados del trabajo son una empresa de diseño polaco llamada Plasterlina, y no podemos ser más fans del resultado.
Seguro que muchos nos acordamos de cuando éramos niños. Esos momentos de infancia en los que más nos gustaba era escondernos de los mayores. Bajo de la cama, tras una puerta o dentro de un armario. Cualquier lugar era bueno para soñar y crear aventuras improvisadas. Hoy os quiero acercar un poco de esa magia en forma de refugios infantiles. Refugios de diferentes características que podrías incluir en los dormitorios de tus hijos.
Aunque toda la casa de Susana Sandonis es una verdadera maravilla, la habitación de sus hijos, Martina y Nico, es para enmarcar. Sí, uno de esos lugares mágicos en el que ni el desorden parecería afear nada.
En ambas camas, se añade una pequeña repisa que funciona a modo de mesita de noche. Un espacio ideal para que los niños puedan colocar sus libros de cabecera. Así, la necesidad de privacidad que demandan los peques, está completamente cubierta con esta gran estructura.
No es la única zona de almacenaje de la habitación. Se aprovecha la luz que da la ventana principal para situar una estantería a medida. Una estantería personalizada del mismo material que el resto de los muebles. En el mismo, un montón de baldas para colocar los libros de los pequeños. Incluso un banco, que se extiende también a la ventana, para que los niños puedan tumbarse y leer todas esas aventuras llenas de dibujos que guardan.
Recuerda, en parte, a la decoración nórdica, en la que el pino es gran protagonista. c cama preciosa, con un somier que lejos de estar oculto se muestra. A juego esa mesita de noche sencilla, sin cajones, pero con un espacio para poder colocar los libros de cabecera de tu hijo.
Un rincón lleno de cojines mullidos en los que tu hijo puede jugar recreando lugares lejanos. O simplemente tumbarse mientras disfruta de una apasionante lectura. El toque verde en la parte superior es un acierto absoluto que rompe con la sobriedad de los colores escogidos.